martes, abril 04, 2006

Esos locos "viejitos"

Los abuelos son graciosos, pero en retrospectiva. El otro día vi a uno en la micro que sin duda merecía el apelativo de "viejo sabio". Iba de pie, igual que muchos de nosotros, aplastados y torcidos, tratando de mantener el equilibrio para no caer de esa máquina infernal a las 8:20 de la mañana. El viejo estaba en la parte delantera del bus, al lado del chofer, hundido contra el fierro ése que protege la caja de las monedas y con un pie al borde del precipicio... el precipicio que para él puede significar un peldaño... Yo estaba en mejores condiciones, cerca del primer asiento, agarrada firmemente de ese pseudo calefont llamado "cobrador automático"... como verán, mi situación era mucho más confortable. El caso es que llegado el momento en que la señora que estaba instalada en el primer asiento se paró para descender, el abuelo... en una contorsión que ya se quisiera el mejor de los atletas, giró cual "lulo" por entre el montón de gente y en una fracción de segundos se encontraba plácidamente instalado y arreglándose la chaqueta en el asiento que por derecho "espacial y circunstancial" me correspondía. Todos, yo más, quedamos perplejos. Creo que la mayoría pensaba en la cantidad de veces en que hemos cedido nuestro puesto en favor de algún frágil e inocente "viejito": en la cola del banco, en el supermercado, en el metro o bien en la misma micro. Creo que la mayor parte del tiempo subestimamos a estos seres que si bien en algunos momentos nos colman la paciencia, tienen la virtud de parecernos divertidos cuando se los recuerda. Creo que efectivamente los años te van dando esa sabiduría, la sabiduría para entender que la vida es rápida y vertiginosa, que es bueno luchar por las cosas que queremos, siempre y cuando eso no signifique dejar dañado a alguien más en el camino, la sabiduría para entender que haciendo las cosas que nos gustan somos un poco más felices, como este blog para mí, la sabiduría para entender que si no lo tomas ahora, puede que no sea nunca... aunque sólo sea el asiento de una micro.

3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

cuando lei el título de la historia pensé....yaaa la claudia escribió sobre mi papá jaajaAJAJaj na ke ver.
Creo que ya estaba bueno que escribieras algo un poco más divertido...tenis que juntarte más conmigo po. así te salen cosas chistosas.
ya hermangui
le dejo trankilo su notebbok
me voy al tuto
chaus

11:13 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Es raro esto de "postearte".
Si tai con ganas de escribir podrías hacer algo con las historias que recordamos en los correos... ahhh qué tiempos aquellos.
Ya iremos en micro o en el metro, bien viejas, peleando con algún pendejo pa que nos dé el asiento...
pone más fotos pa la promoción

6:15 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

ahhh que tiempo aquellos en que me levantaba temprano y tenia que tomar un micro llena y sucedian historias como la que acabas de contar....ya casi se me olvidaba que existian...se me olvida que la gente aun hace eso...mientras yo duermo el mundo sigue girando...es algo interesante...le pondre mas atencion...ah y yo al igual que el fome de tu hermano tambien pense al leer el titulo que la historia era de otra cosa, pero me equivoque...igual ta wena la historia...yo ahora nunca mas pienso dar un asiento en una micro..porque cuando necesite que me lo dieran a mi pq andaba con yeso en la pata nadie me lo dio...asi que esa es mi venganza contra el mundo.
bueno eso...ojala se suba lo que escribi no como la otra vez
cuidate besos, nos vemos el viernes si alcanzas a llegar

pd: juntarte con el chelo no te hara contar cosas chistosas, el necesita libretistas para decir cosas graciosas.

11:32 p. m.  

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