Generación Perdida

Cuando era chica ví una película gringa que llevaba por título "The lost boys", una cinta entretenida más que nada, que narraba la historia de una típica familia norteamericana que llegaba a vivir a un pueblo plagado de vampiros y que tenía en su reparto a los más IN de los teenagers hollywoodenses. Por supuesto yo estaba enamorada de Corey Haim, un pre púber blancuchento y con cara de poto que protagonizaba el filme. La nunca bien ponderada traducción al español del nombre de la película era "Generación Perdida" y hasta el más entendido de los cinéfilos podría haber pensado que se trataba de cualquier volá de tipo existencial. Ahora bien, hace unos fines de semana atrás haciendo zapping por la televisión me quedé pegada viendo un programa nacional en el que varios estudiantes de los más variados colegios (desde fiscales hasta ABC1) tratan de acertar a varias preguntas básicas para optar a ganar el tremendo viaje de estudios por el sur de Chile. El primer día que lo ví, vino rápidamente a mi mente el recuerdo del nombre de aquella añeja película. Y puede que suene un poco fatalista, pero de verdad que me sorprendió amargamente el podrido nivel cultural de nuestros queridos "pingüinos"... esos mismos que hace unos meses atrás tuvieron en vilo a todo un país, los primeros que hicieron temblar a nuestra mandataria y los mismos que derribaron cabezas como la del mal recordado ministro Zilic. Es casi inexplicable y muchísimo más triste ver a chicas saliendo de cuarto año medio sin saber siquiera lo más elemental de reproducción humana como por ejemplo que son las "trompas de falopio" (ojo!... las preguntas son con alternativas)... eso me hace pensar en la gran cantidad de adolescentes embarazadas en nuestro país y el porcentaje duro de embarazos no deseados en Chile me hace mucho más sentido después de haber visto ese programa. También me sorprende en demasía que la capacidad intelectual de los chicos escolares alcance tan sólo para reconocer quien fue "pichichi" en España pero no para responder, al punto de temblar de vergüenza, quién es el pintor de los frescos de la Capilla Sixtina.
Hoy están nuevamente movilizados y lamentablemente muy pocos de ellos saben cuál es el motivo real por el que están luchando. Es una lástima que en el mundo globalizado que hoy vivimos, con la facilidad para acceder a libros, internet y variada información se le dé tan poco valor a la educación... es una enorme paradoja que quienes más pelean por ella sean los mismos que menos voluntad tienen para aprovecharla... Cuando yo estaba en el colegio no existía ni la mitad de posibilidades que hay ahora y a pesar de todo mi sed por aprender nunca se apagó... después de todo parece que ese dicho de que "a veces menos es más" hoy tiene mucho sentido.